Decir que internet transformó el mundo es un lugar común. Nada volvió ni volverá a ser igual y, para bien y para mal, todo sigue en permanente cambio: la música, el cine, la televisión, los medios de comunicación, entre tantas otras cosas, siguen buscando el camino que los encarrile ante las nuevas maneras de consumo en un mundo digital.

Hoy vivimos conectados, y nos enfrentamos a personas que se han vuelto un propio canal de comunicación desde blogs hasta las redes sociales. La atomización de la información, por lo mismo, cada vez crece más: el mundo entero encontró la posibilidad de decir algo cuando años atrás no tenía dónde ni cómo. Todos somos un medio. La publicidad también empezó a buscar su lugar presa también de este caos. ¿Qué hacer entonces?

La respuesta está en la creatividad. En un mundo conectado 24/7 donde cada usuario de redes sociales busca encontrar algo diferente y valioso, la creativi- dad es el único camino posible. ¿Puede uno volverse creativo? ¿La creatividad se aprende? ¿Cómo aplicar la creatividad al mundo digital? ¿Cómo la creativi- dad puede ayudar a generar contenidos de valor en medio de esta saturación de “cuentas”, “influenciadores”, “instagramers” y demás? ¿Cómo monetizar la creatividad? ¿Es esto posible? Lo invitamos a leer este libro que le ayudará a pensar diferente, creativamente, mientras se divierte.